HUMOR


Dos madres se encuentran en el descanso de la escalera y una le dice a la otra:

- ¿Qué tal tu hija?

La otra contesta:

- De maravilla, después de hacer la entrevista para ese trabajo que te dije la escogieron, en 2 semanas la han ascendido de administrativa a Jefa de Sección, el jefe le ha dado un coche de la empresa y ahora le va a alquilar un apartamento cerca de la oficina para que tarde menos enllegar al trabajo.

- ¿Y la tuya?

- Pues la mía igual de puta pero con menos suerte...

---------------------------------------------

..Ring, ring...

- ¿Sí? - Doctor, doctor, mi mujer está a punto de dar a luz!- ¿Es su primer hijo-? No, soy su marido.
--------------------------------------------------
No es lo mismo lo que ayer nos unió hoy nos separa... que lo que ayer nos unio hoy no se para.

-------------------------------------------------

Un científico norteamericano descubrió con sus estudios que las personas que

no tienen suficiente actividad sexual leen los e-mail con la mano posada en

el ratón.

..Ahora no vale la pena quitarla.

..Ya es tarde.
---------------------------------------------

Salacio, hombre muy dado a las concupiscencias de la carne, le anuncia a su mujer: "Esta noche haremos el amor estilo águilas imperiales".

"¿Cómo es eso?" -pregunta la señora. "Espalda con espalda" -explica el lúbrico señor.

"¿Espalda con espalda? -repite ella muy intrigada-. Y eso, ¿nos dará algún placer?" "Claro que sí -asegura Salacio-. Invité a otra pareja"

---------------------------------------------

.. La pobre madre se angustiaba al ver que su hijo no sentaba cabeza. "Deberías tomar esposa" -le aconsejaba una y otra vez.

Un día el muchacho le dijo: "Madre: voy a tomar esposa". "¡Qué bien, hijito! -se alegra la señora-. ¿Cuándo?"

"No sé -responde él-. Todavía no he decidido la de quién voy a tomar"

----------------------------------------------

.. Llegó un sujeto al consultorio del médico general, cuya sala de espera estaba llena de pacientes. Con voz que todos pudieron escuchar le dice el tipo a la recepcionista: "Quiero una consulta con el doctor".
Pregunta ella: "¿Cuál es su problema?" Responde el individuo: "Tengo dificultades con mi pizarrín".
"¡Oiga! -le impone silencio la enfermera bajando la voz-. ¿Qué clase de lenguaje es ése?"
"Señorita -se justifica el hombre-. Usted me preguntó cuál era mi problema, y se lo dije".
"Sí -replica la mujer-. Pero la palabra que usó es inconveniente. Pudo decir, por ejemplo: 'Tengo dificultades con mi nariz', y luego explicarle al doctor su verdadero problema. Retírese y vuelva mañana, pero use un vocabulario más apropiado".
Al día siguiente, en efecto, el tipo regresó. Otra vez la antesala del facultativo estaba llena. Va el hombre con la recepcionista y le dice: "Quiero una consulta con el doctor, señorita".
Ella, que reconoció al sujeto, le pregunta clavándole una mirada penetrante: "¿Cuál es su problema?" Responde el tipo: "Tengo dificultades con mi nariz". "Entiendo" -dice entonces con alivio la enfermera.
"Sí -prosigue el individuo-. Ya no se me levanta

No hay comentarios: