A Tutankamon...

Aún me sorprende los dedos de tus pies
tan lozanos, tan fresco y tan radiantes
si los míos ya los tengo del revés
y mis uñas pueden cortar hasta el diamante.

El día en que en el Louvre yo te hice
esta foto a hurtadillas de los guardias
casi muero en el intento cuando quise
quedarme con la tela que te guarda...

Que sensación más grande me produjo
verte a la intemperie y sin tu losa
me hechizaron tus pies con ese embrujo
y en tu tumba te plante una bella rosa.

Un oh se escapo de mi garganta
solo en tu cara aparecía la muerte
pero ese brillo que tenias en tus plantas
a mi lado se plantaba de repente...

A mi cuerpo zarandearon y ya despierto
me encontré acariciándote los dedos
y dos guardias me pusieron bajo arresto
y de bruces me postraron contra el suelo.

Hace ya cuarenta años de esto
mi querido y admirado faraón
y aunque te llevaron a tu Egipto incierto
en mi foto te tengo...hijo del sol.

Esta foto se la hice a Tutankamon cuando estaba expuesta en el Museo del Louvre y es una de mis joyas de las muchas que hice en otros viajes, esta es especial para mi...