PORQUE LA LIBERACION FEMENINA NO FUNCIONA EN MEXICO.


Una Alemana les dice a sus amigas 
'Un día llegue a mi casa y le dije a mi marido:

- ¡HANS! ' Óyeme cerdo patán, a partir de hoy tu preparas la Comida… 'Al primer día no vi nada... al segundo tampoco... pero al tercer día HANS empezó a preparar la comida'.
Todas aplaudían '¡¡¡Eh bravo, bravo así se habla!!!'
Una Francesa dice:'Un día llegue a mi casa y le dije a mi esposo:
- ¡¡PIERRE!! Bastardo inútil, a partir de ahora tu friegas el piso… 'Al primer día no vi nada, al segundo tampoco... pero al tercer día PIERRE limpió los pisos.'
Las mujeres gritaban '¡¡¡Eh bravo, bravo eh!!!'
La Mexicana: dice: 'Yo llegue un día a mi casa y le dije mi marido:
- ¡¡¡PANCHO!!! ¡¡¡Huevón hijo de tu chingada madre, a partir de hoy tú te preparas tus chilaquiles y tus huevos a la mexicana y tus sopecitos y me vale a que hora llegues!!! Al primer día no vi nada... al segundo día tampoco... pero al tercer día como que ya empecé a ver poquito con el ojo izquierdo...'

Usando a tu mujer



Tocan la puerta de la casa de una mujer.
Ella va a abrir y se encuentra con un hombre
parado frente a ella que le pregunta: ,
¿Ud. tiene vagina?
La mujer disgustada le tira la puerta en la cara.

A la siguiente mañana vuelve el mismo hombre y le hace la misma pregunta:

¿Ud. tiene vagina?
Ella le tira la puerta en la cara nuevamente
A la hora que llega su esposo le cuenta lo que está sucediendo en los últimos dos días.

El marido le dice a su mujer con una voz amorosa y condescendiente: Amorcito, mañana no tengo que trabajar, así que avísame si aparece nuevamente ese hombre.

A la siguiente mañana otra vez tocan la puerta y ambos corren a abrir,
 pero el marido se detiene y le susurra a la esposa:

Amorcito, voy a esconderme detrás de la puerta para escuchar lo que te dice.
Si es el mismo tipo, quiero que le respondas que sí para saber qué quiere contigo.
--Ok-- dice ella y abre la puerta. Era el mismo tipo que le pregunta: --
¿Ud. tiene vagina? --Si-- responde ella --¡Excelente!-- contesta el hombre. --
Por favor, si no le importa,
¿podría decirle a su marido que deje quieta la de mi mujer y empiece a usar la suya?